Praying the floor won’t fall through, again. # L I B R E .

Y ahí estaba de nuevo, sonriendo falsamente a todos los lugares posibles. Su padre la había llevado solo "por si le interesaba" a una de esas tantas reuniones del Parlamentums, esta vez ninguno de sus hermanos estaba presente. Cosa que le extrañaba.
Luego de la misma al parecer todos ellos se reunian a conversar e intercambiar temas de interes comun. Y para ser sinceros..¡No tenia interes alguno de hablar con los amigos de sus padres! . Que sí, se encontraban "amigos" de sus hermanos ahí que le intercambiaban una que otra mirada que de vez en cuando la asustaban, solo bufaba de la impotencia al no saber como escaparse de ahí.
Alguna vez recuerda, hace un año atrás, cuando escucho a su padre hablar con un amigo de el y con su hermano acerca de coprometerla a ella con el hijo del susodicho.
Tambien recuerda la rabieta y tremenda pelea que se llevo con su padre acerca de eso, ¿Comprometerla a ella? ¿Pero que se creían? ¡Eso si ya era pasarse de la raya con su vida!.
Desde ese día tambien tomo la decision de estar lo más posible alejada respecto a todo tema. Aunque sabe que si bien no le tomaba interes y se dejaba llevar por lo que su otro hermano le contaba, terminaría como el: Dejando The Rose y uniendose a Los Radicals.
Regresando al momento, se acerco con su padre y haciendo uso de sus excelentes modales, le pidio permiso para retirarse. Claro, como se lo iba a negar si su pequeña se lo estaba pidiendo.
La excusa fue simple: Se encontraría con una amiga para merendar algo. Aunque lo que menos quería era eso ahora. No sabe como logró evitar que la manden con la institutriz que la cuidaba, talvez el Sr. Beckett se encontraba muy ocupado charlando con los demás miembros del Parlamentums.
La castaña de dirigio al centro de The Rose, especialmente al Museo, ya que aquel lugar era el menos concurrido a esas horas de la tarde, talvéz por el frío que alejaba a las personas de las calles y las refugiaba en la calidez de su hogar.
El museo era uno de sus lugares favoritos, sentía que tenía todo de lo antiguo, lo nuevo y lo presente en un mismo lugar. Su pintura favorita era Noche Estrellada , de Van Gogh, por lo que siempre que entraba al lugar se quedaba varios minutos contemplandola. Era de las tantas que habian recuperado anteriormente.